jueves, 20 de mayo de 2010

Veneno de Caracol

Observas ese pétalo
su esbelta cintura
afinándose
en tus dedos.
Unos o dos pliegues
su torso desnudo,
desnivelado.

Observas el rosal
sus hijas van
abriendo sus gargantas.
El introito de las dudas.
las veteranias del jardín.
Los tentáculos anónimos
que no te definen.


Detrás de los cardos en la tierra
mas oscura , yacen algunos
cuerpos; los insectos van velando
sus carnicerías.


Observas los narcisos.
Las alegrías corrugadas.
Los nísperos desviados
al cenit
Te vas arrastrando,
una fina humedad
toma tu sombra.


Observas una perla una
minúscula perla
que huele
huele tan exquisita
Esa minúscula perla que
devoras tan minúsculamente.
Y te va tragando mientras
caes al piso.

1 comentario:

  1. Excelente trabajo. De verdad que parecía iba montado en la caparazón del caracol. Ver al mundo desde este ángulo fue una gran experiencia. Y es muy rico en cuanto a otras lecturas, más allá del gusto de la forma y la palabra por sí mismas, me dejó pensando. En lo personal, una cualidad muy poderosa en un poema: que te quede revoloteando en la cabeza.

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